En la cultura hindú abundan múltiples dioses de las cuales se les asignan su nombre en las posturas del yoga. Hoy entramos con una que tiene por nombre Garudasana, una de las posturas de nivel intermedio que requiere de mucho esfuerzo y un poco de flexibilidad corporal para poder realizarse de un modo completo y que se pueda disfrutar de todos los beneficios que este asana pueda ofrecer.
El dios águila se considera uno de los dioses más vitales de la cultura, por lo que esta postura no solo te ayuda físicamente, sino también espiritual y mentalmente en donde podras liberar todo tipo de tensión del cuerpo y disfrutar de la calma.
Nombre en sánscrito: Garuda significa en nuestro idioma como “dios águila” que en unión con asana “postura” complementan el nombre de Garudasana.
Tipo de postura: De pie con flexión.
Nivel de postura: II
Beneficios
El Garudasana te ayuda a fortalecer y tonificar las pantorrillas como los tobillos en conjunto permitiendo aliviar problemas como:
1. Inflamación de tobillos
2. Lesiones en las piernas y manos.
3. Ayuda a mejorar el equilibrio del cuerpo.
4. Ayuda a que el cuerpo pueda controlar su propio peso corporal.
5. Calma la mente y abre paso a la meditación.
6. Puede prevenir las siguientes dolencias: Asma, hernias, estrés, hipertensión, etc.
Instrucciones paso a paso
1. Debes estar en la posición del Tadasana y comienza por doblar ligeramente las rodillas con un ángulo o mayor de 25 grados. Procede a levantar el pie izquierda y trata de equilibrarte con el derecho, a su ve que intentes cruzar el muslo izquierdo con el muslo derecho.
2. Intenta que la punta de los pies izquierdos apunten siempre al suelo.
3. Estira los brazos y crúzalos delante de tu torso, de modo que el brazo derecho se encuentre posterior al izquierdo.
4. Fíjate que el codo derecho se encuentre dentro de la curva interna del codo izquierdo y junta las palmas de las manos presionándolas.
5. Haz una sesión de 15-30 segundos y cambia de postura en Tadasana y repite con los otros lados.
Contraindicaciones y precauciones
1. Esta postura no puede ser realizada si está sufriendo de artritis avanzada o lesión y desgarro especifica en las zonas trabajadas es preferible abstenerse a realizar esta asana.
Consejos y accesorios
Se recomienda hacer esta postura con lentitud y paciencia, cuidando del equilibrio para evitar accidentes.