Me llamo Irene y mi historia con el yoga comienza en 2010 en San Francisco. En una época de viajes y cambios, asistí a clases de yoga en distintos centros, todos ellos formaban parte de una comunidad llamada “Yoga to the People” que pretendía acercar el yoga a todo el mundo y por ello las clases eran gratuitas, las personas que acudían daban en donativos lo que podían. Había tal afluencia de gente que las clases estaban llenas siempre y tenías que ir con suficiente antelación para encontrar sitio.
Al instalarme en Dublín, seguí con la práctica del yoga en un estudio llamado “Yoga Hub”.
Pero donde realmente profundicé en el camino del yoga fue al trasladarme a España, cerca de Gibraltar, donde tenia que desplazarme más de 20 kms para poder asistir a las clases. Descubro entonces los beneficios que me aporta no sólo físicamente sino también emocional y mentalmente, se convirtió en la válvula perfecta de escape del estrés del trabajo. Me aportaba un equilibrio que hace que esté enganchada a él y lo considere imprescindible en mi vida.
Sin intención de ser profesora, pero con la idea de conocer más sobre el yoga y realizar una práctica más consciente, inicio entonces dos formaciones de profesores de yoga de 200h por la Yoga Alliance en las escuelas “Yogashala” de Marbella y en “Espacio para el Yoga” de Sevilla.
Pero de forma casi casual empiezo a dar clase a amigos en la playa. Descubro entonces otra forma de sentir el yoga, me encanta el poder compartir una clase y sentir la energía que mueve la gente, ayudándoles de alguna forma a mejorar el estado de su cuerpo físico, mental y emocional.
Las clases se convierten en una parte complementaria a mi práctica del yoga. Yogisima empieza 2019 para dar u
Hablando con otras compañeras del curso, decidimos crear un pequeño estudio de yoga: “Vitayoga” en la Línea de la Concepción, un espacio donde compartir nuestra pasión por el Yoga a través de estilos y personalidades muy diferentes, pero con la misma intención que la comunidad de “Yoga to the People” en San Fracisco, guiar a la gente en el descubrimiento y la practica del yoga.
Este proyecto dura 1 año, pero decido dejarlo al quedarme embarazada y empezar a serme incompatible con el embarazo, el trabajo y la finalización de la formación de profesores de yoga de 500h.
Ahora con mi hija Alma de 3 meses retomo este proyecto como una parte más de mi práctica de yoga. Esta web me sirve para compartir mi pasión por el yoga y todos los conocimientos que he ido adquiriendo, esperando que te sea útil en tu camino del yoga.
atha yoga anushasanam